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Cuántas veces oigas el reloj dando las tres, sumérgete totalmente en Mi misericordia, adorándola y glorificándola; suplica su omnipotencia para el mundo entero y especialmente para los pobres pecadores, ya que en ese momento se abrió de par en par para cada alma (Diario, 1572).

viernes, 5 de octubre de 2018

ICONOGRAFÍA EN EL CONVENTO



LA ICONOGRAFÍA DENTRO DE LA CONGREGACIÓN

     La Patrona de la Congregación de las Hermanas de la Madre de la Misericordia se muestra como una imagen de María con las manos extendidas – tal es la nota que aparece al inicio de las constituciones religiosas de la Congregación (artículo 11). 

Estas manos extendidas de María están llenas de todas las gracias y dones que desea distribuir a la gente; el primero de estos dones, que es el mayor de ellos, es el Hijo de Dios – la Misericordia Encarnada.

 Las hermanas recibieron la figura de la Madre de Dios de la Misericordia de Francia (Laval), de donde sacaban el modelo de vida conventual para la congregación y de su trabajo apostólico. 

En el altar principal de la capilla del convento de la Congregación de La Madre de Dios de la Misericordia, en Laval, la Virgen era venerada, y lo sigue siendo, sin el Niño Jesús, y con los brazos extendidos hacia el pueblo (figura que se hizo mucho antes de la revelación de la Medalla Milagrosa, en la que María aparece de una manera similar). 

    La fundadora de la Congregación, la madre Teresa Eva de los príncipes Sułkowski, condesa Potocka, no solo instauró los modelos de la vida conventual y de trabajo apostólico en Polonia y trajo las copias de las Constituciones francesas de la Congregación y las normas del trabajo apostólico con muchachas y mujeres precisadas de una profunda renovación moral, sino que también trató de reflejar lo más fielmente posible el espíritu y las costumbres de la Congregación francesa. 

Por eso, también adoptó la figura de la Virgen María, venerada como la Madre de Dios de la Misericordia en Francia, figuras que todavía adornan las capillas y conventos de la Congregación.
      En el período entre las dos guerras mundiales del siglo XX, el Capítulo General de la Congregación consideró aceptable la propuesta de tener como patrona principal a la Madre de la Misericordia, según la famosa imagen milagrosa del Santuario de la Puerta de la Aurora, de Ostrabrama (en la Puerta la Aurora), en Vilna. 

La aparición de esta idea, sin duda alguna radica en el culto tan popular de la Madre de Dios de la Misericordia, en la Puerta la Aurora, y tal vez también por las raíces polacas de dicho santuario y la presencia de la Congregación en Vilna, en Antokol; también influyó, con certeza, la separación total de la Congregación en Polonia, de la Congregación en Laval, Francia, lo que tuvo lugar en 1922 después de 44 años de la Vicaría (que determinaba la dependencia de la Superiora general en Francia). 

     Sin embargo, como resultado de la votación que se hizo, las hermanas decidieron mantener las raíces francesas de la Congregación, con lo cual la imagen de la Virgen María, como Madre de la Misericordia, en la figura con los brazos extendidos, siguió siendo la que representaba a la Congregación. 

     Imágenes de La Madre de Dios de la Misericordia de Ostrobrama, como la de la Puerta de la Aurora, se encuentran en el Santuario de la Divina Misericordia en Cracovia-Lagiewniki, en la capilla principal del convento que está bajo la advocación de la pasión del Señor, y en la Basílica del Santuario de la Divina Misericordia, así como en la capilla de la Congregación en Gdansk.

En 1937, con motivo de la elección de María, Madre de la Misericordia, como patrona de la Congregación, se imprimieron imágenes conmemorativas de la Virgen María, que con su manto cubría, por un lado a las hermanas de la Congregación, y por otro, a las pupilas bajo sus cuidados. 

    En el reverso de la estampa, había impresa una preciosa oración, cuyo rezo otorgaba a las personas que la rezaban una indulgencia parcial. Cuando se produjo el acto de elección de María, como Superiora General Celestial de la Congregación, este oración fue rezada en cada uno de los conventos de la Congregación, el 15 de agosto de 1937 años, y como nos escribe santa Faustina: al final de ese acto vi a la Santísima Virgen que me dijo: Oh, qué grato es para mí el homenaje de su amor. Y en ese mismo instante cubrió con su manto a todas las hermanas de nuestra Congregación. Con la mano derecha estrechó a la Madre General Michaela y con la izquierda a mí, y todas las hermanas estaban a Sus pies cubiertas con su manto. (Diario 1244).

    Estos acontecimientos fueron los que permitieron asociar la imagen a la iconografía más antigua que presentaba la misericordia de María, desde el siglo XIII, imagen que ya estaba muy extendida en muchos países de la Europa occidental. En los últimos años, en los conventos de la Congregación (en Cracovia, y en la capilla de Zakopane también), han aparecido imágenes de la Mater Misericordiae, con el manto extendido como expresión de su protección maternal.
Escrito por: Sor M. Elżbieta Siepak ZMBM
Traducción del polaco: Xavier Bordas Cornet

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